Si es verdad que los Reyes Magos viajaron desde Tartessos, nada más salir de tierras de Huelva, mostraban sus alforjas llenas de cariño en la localidad de Fuentes de León, al sur de la provincia de Badajoz, derramando en la noche del pasado cinco de enero importantes dosis de un regalo muy especial, la solidaridad de todo un pueblo que vibraba al ver la felicidad de la familia Márquez Sánchez.
Noche de Reyes y noche de esperanza para la pequeña Cristina Márquez, de diez años de edad, que podrá disfrutar, a partir de ahora, de la nueva silla de ruedas, que le entregaban en nombre de todos Melchor, Gaspar y Baltasar, tras las actuaciones desarrolladas en los últimos meses por el grupo de voluntarios de Protección Civil en esta población.
Su madre, Magdalena Sánchez Lamprea, de 33 años de edad, recibía visiblemente emocionado, junto a su hija, el enorme estímulo de sentirse respaldada y querida por sus paisanos: Con lágrimas en sus ojos y una intensa emoción contenida sobraban las palabras. Aún así dijo: "Ha sido muy emocionante, siento de verdad el cariño de todo el pueblo y estoy muy contenta en nombre de ella y de toda nuestra familia, muchas gracias a todos".
Como explicó el responsable local de Protección Civil, José Chávez Santana: "Cristina Márquez, tiene una parálisis cerebral y síndrome de Rett"; un trastorno que se da casi exclusivamente en niñas y que se inicia en la primera infancia, sustanciado en una mutación que provoca la ausencia de un factor genético específico, necesario para el normal desarrollo de determinadas regiones del cerebro responsables de funciones sensoriales, emocionales, motoras y autónomas.
"Ante este caso, añadió Chávez, teníamos que actuar. Hace meses comenzamos a recoger tapones de plástico para Mari Paz, la niña de Jerez de los Caballeros, pero a través de una vecina de Fuentes, nos alertaban de una necesidad muy concreta en nuestro pueblo, las carencias de la pequeña Cristina, que no disponía, entre otras cosas, de una silla eléctrica muy necesaria para su movilidad.
Iniciamos una pequeña cuestación, primero con la venta de papeletas y luego con un importante fin de campaña que permitió que se implicase, prácticamente, todo el pueblo hasta alcanzar los dos mil euros que nos costaba la silla.
Más adelante, conocimos que había algunas otras necesidades y a través de donaciones y fondos propios del equipo de Protección Civil en Fuentes de León, conseguíamos, contando con el apoyo y la implicación de la congregación de las Hermanas Dominicas de nuestra localidad, una grúa de movilidad, para que los padres de Cristina la puedan mover perfectamente arriba y abajo.
Por último conocimos que le vendría bien una cama articulada y nos pusimos manos a la obra. Cristina ha sufrido varias operaciones, y está pendiente de alguna más que la postrará en cama durante varios meses. Con ella, pensamos que podríamos ayudarla a hacerle su vida más fácil y para ello implicamos en nuestro proyecto a los amigos de la Asamblea de Cruz Roja de Fuente de Cantos, gracias a su colaboración conseguíamos también esta cama especial que le permitirá descansar de una forma más cómoda".
En esta ocasión, por tanto, SS.MM. llegaban, representando la ilusión de Fuentes de León, con sus manos repletas de cariño hacia la pequeña Cristina y con el tradicional oro, incienso y mirra, transformados en esa silla eléctrica, una grúa de movilidad y una cama articulada.
La ocasión merecía la pena y varios centenares de vecinos, de todas las edades se reunían, en la Plaza de España, a las puertas del ayuntamiento, desafiando el frío de la noche y derrochando importantes dosis de calor humano, en la noche más especial y mágica del año. Una noche que, probablemente, Magdalena y Ángel, los padres de la pequeña Cristina no olvidarán jamás.
Antes del desarrollo de estos actos SS.MM. habían recorrido las calles de la población, como en tantos y tantos pueblos de España, derramando alegría y sonrisas, entre el cariño de los niños de Fuentes de León.
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