domingo, 12 de agosto de 2012

Un comportamiento ejemplar


    Me gustaría compartir con vosotros mi experiencia con respecto al conducir después de ingerir alcohol.

    La noche del pasado sábado, fui con unos amigos de copas. Al final, perdí la cuenta de lo que me había tomado en cervezas, aperitivos,
    vinos, caipiriñas, mojitos y otros cacharros.
    Dándome cuenta de lo borracho que estaba, hice algo que nunca había hecho en mi vida. Dejé mi coche y cogí un autobús.
    Creerme, volví a casa con una sensación de seguridad absoluta y sin ningún tipo de problemas.


    Y lo que mas me gustó es que nunca antes había conducido un autobús.

1 comentario:

  1. Jaja. Lo mismo le pasó a un primo mío que se quería venir a España en el Concordia...
    ¿Cómo se llamaba, leñes?

    ResponderEliminar